La tradición de las votaciones hasta el minuto dice que los nombres para reemplazar a Elisa Loncon y Jaime Bassa en la mesa directiva de la Convención Constitucional recién se definirán en las últimas horas posibles para hacerlo o en la misma elección de la testera, que será el 4 de enero.
Por mientras, hay conversaciones en los pasillos del ex Congreso, por Zoom, por Whatsapp, y entre «hoy y mañana» continúan las tratativas, según repiten los representantes de distintos colectivos.
Al menos, los nombres de los candidatos ya están prácticamente resueltos: en las últimas horas se confirmó que la exalcaldesa mapuche Ramona Reyes es la elegida del Colectivo Socialista y que la abogada Amaya Alvez, una de las opciones del FA, finalmente desistió y la apuesta principal es la periodista Beatriz Sánchez.
«Ella reúne las mejores características: mujer, educada en la gloriosa Universidad de Concepción de la cual formo parte y me parece que es alguien que comunica muy bien, es afectuosa, cercana y empática. Creo que es lo que la Convención requiere», sostuvo el lunes Amaya Alvez en conversación con EmolTV.
Quienes se mantienen firmes son la periodista Patricia Politzer, de INN, que aseguró que estaba «disponible» pero que deseaba que su nombre fuera una opción de consenso «transversal»; Cristina Dorador, la científica que postula Movimientos Sociales Constituyentes; Eric Chinga, del pueblo diaguita, que es la opción de la nueva Coordinadora Plurinacional y Popular; y la abogada del PC Bárbara Sepúlveda, que también confirmó estar dispuesta a participar de la mesa la semana pasada.
MATEMÁTICA DE LA NEGOCIACIÓN
Pero los números son decidores: quienes en teoría están más cerca de conseguir alguno de los puestos principales en la mesa directiva -que requieren 78 votos- son los constituyentes del bloque que actúa como bisagra en la Convención: el Frente Amplio, Independientes No Neutrales, Colectivo Socialista y Colectivo del Apruebo.
En total, esos cuatro colectivos suman 53 votos y dependiendo del candidato podrían sumarse Bessy Gallardo, Loreto Vidal y Renato Garín, que no participan de ningún colectivo en la actualidad.
«Espero que se lleguen a acuerdos y se puedan sopesar las virtudes y capacidades de cada una de las candidatas. Es importante que se considere el tema de descentralización, es simbólico para el país que no todo el mundo sea de Santiago, pero siento que las dos candidatas (Sánchez y Politzer) tienen harto manejo político y de gestión y eso puede ser muy bueno», comenta Ramona Reyes a Emol.
Los nudos en toda esa conversación son dos: primero, hay un álgido debate sobre si el Frente Amplio debería participar o no de alguno de los dos roles protagónicos de la mesa, dado que ya tuvieron a Jaime Bassa ahí y que cualquier error que cometa el nuevo Gobierno podría ser derivado también a la Convención.
«Lo que corresponde es que el poder constituido esté separado del poder constituyente y vamos a tener desde marzo un Presidente de esa coalición y por lo tanto los dos miembros de la mesa deben ser de otras coaliciones, para que se mantenga esa distancia con el poder constituido», sostuvo Benito Baranda (INN) este miércoles. Además, Baranda advirtió que, de llegar el FA también a la testera, podrían existir sospechas de que «la nueva Constitución sea un reflejo de un programa de Gobierno».
En segundo lugar, en distintos sectores transmiten que Patricia Politzer no generaría un consenso mayoritario, como ella misma lo está buscando. De hecho, en su propio colectivo reconocen que como su figura es asociable a la Concertación, generaría ciertos resquemores en otros grupos.
Uno de los grupos clave para sumar respaldos es el PC, que cuenta con 10 constituyentes, que forma parte de Apruebo Dignidad pero que ha votado en otras ocasiones más cerca de los movimientos sociales y ex Lista del Pueblo, por lo que las conversaciones de los próximos días serán relevantes para saber a dónde irán sus apoyos.
Las tratativas del PC en las próximas horas se concentran en el Colectivo Socialista, Movimientos Sociales Constituyentes (MSC) y Pueblo Constituyente (ex LLDP).
Otro de los sectores que ha actuado con cierta cohesión es el de los escaños reservados, Pueblo Constituyente y MSC. Esos grupos suman en total 51 votos, entre 17 escaños reservados, 13 miembros de Pueblo Constituyente -eran 16 con Rodrigo Rojas Vade y dos convencionales que se fueron esta semana-, 12 de MSC, un último constituyente de La Lista del Pueblo, cuatro de la Coordinadora Plurinacional y Popular, cuatro más del comité mixto (Elsa Labraña, Lissette Vergara, Adriana Ampuero y Constanza San Juan).
No obstante, ahí también hay varios candidatos: Chinga y Dorador, hasta el minuto; pero los escaños reservados resolverán en los próximos días si apoyar a un candidato de afuera o nominar a uno de ellos. En las filas propias suenan Rosa Catrileo (mapuche) y Luis Jiménez (aymara), que puso su nombre a disposición.
También hay un problema matemático: si Dorador no tuviera votos suficientes para llegar a alguno de los cargos protagónicos, podría aspirar a una vicepresidencia adjunta. Pero las firmas de su colectivo, MSC, ya estaban comprometidas para apoyar a Bárbara Sepúlveda, dado que Chile Digno (PC y FRVS) apoyó a Elisa Giustinianovich para llegar a la primera testera.
«Los movimientos sociales, lo que era La Lista del Pueblo y los escaños reservados, llegamos a tener un protagonismo y creo que se puede perder. Vamos a llegar hasta las últimas, nos la vamos a jugar hasta el final», afirmó este martes Eric Chinga (diaguita), candidato de la Coordinadora Plurinacional y Popular.
ROL DE LA DERECHA
Todo esto sin contar los 37 votos de la centroderecha. En ambas «almas» de ese sector han asegurado que están disponibles para apoyar a quienes les den «garantías»; y sobre todo desde RN y Evópoli (16 votos) han transmitido que podrían respaldar a quien les asegure patrocinios para alguna de las 5 vicepresidencias adjuntas regulares, que requieren 24 firmas cada una.
También entre este martes y miércoles, RN y Evópoli se reuniría para tomar definiciones más concretas. «Espero que como colectivo podamos influir para que la nueva presidenta sea una persona que -a diferencia de la presidenta Loncon- tenga la altura de miras para diferenciar su cargo con sus opiniones y su figura personal. Una presidenta que deje atrás el excesivo personalismo, que entienda que el tiempo que nos queda es escaso y que necesitamos que se trabaje en la generación de puentes para de esta forma poder concretar la redacción de un proyecto de nueva Constitución», responde Manuel José Ossandón (RN) a este medio.
Sin embargo, hay cierta reticencia en algunos sectores de buscar los votos en la derecha. En la interna socialista hablan de no generar un «acuerdo» con ellos, sino simplemente asegurar que el candidato que impulsen pueda darle garantías de respetar las normas y el reglamento de la Convención a ese sector.
«Hay tres negociadores en mi colectivo y están abriéndose para conversar con todos, menos con la derecha, no estamos buscando votos en la derecha», asegura Ramona Reyes.
En cuanto a las vicepresidencias, también están en camino Lidia González (yagán), Natividad Llanquileo (mapuche), Daniel Bravo (Pueblo Constituyente), Cristián Monckeberg (RN), y en las últimas horas se empezó a mencionar a Constanza Hube, Katherine Montealegre, Eduardo Cretton y Ricardo Neumann, todos de la UDI.
En algún momento estuvo en carrera Isabella Mamani (aymara), pero un grupo de los escaños reservados busca proponerla como la reemplazante de Victorino Antilef en la coordinación de la Comisión de Derechos de los Pueblos Indígenas, por lo que su opción en la mesa directiva podría no concretarse.
POSTULACIÓN DE BEATRIZ SÁNCHEZ: ENTRETELONES
El FA postuló a Sánchez para la sucesión de Elisa Loncón, cuyo reemplazante se definirá el próximo martes. La decisión del FA de competir por la testera desató cuestionamientos de las otras fuerzas que levantaron candidatos (PS, PC e Independientes No Neutrales), apuntando a que sería más complejo que un frenteamplista resguarde la independencia con el futuro Gobierno.
- Desde No Neutrales, Benito Baranda afirmó: “Lo que corresponde es que el poder constituido esté separado del poder constituyente. El presidente y vicepresidente de la mesa debieran ser de otras coaliciones a la del Presidente de la República, para que se mantenga esa distancia con el poder constituido”.
- Desde el PS, su coordinador Maximiliano Hurtado transmitió a sus pares FA María José Oyarzún y Yarela Gómez que para la autonomía de la Convención era “inconveniente” que una excandidata presidencial del FA asumiera el cargo. Boric impulsó la campaña de Sánchez en 2017.
Lo que hay detrás: En el análisis de los constituyentes FA primó el constatar que las opciones en carrera hasta ahora (Sepúlveda, Reyes y Politzer) no estaban concitando la mayoría suficiente en la izquierda. Por un lado, los sectores más radicales de la Convención estaban viendo con resquemor que asumiera una presidencia de los sectores más moderados (como son Reyes y Politzer, asociadas a la centroizquierda). Por otro lado, los moderados no estarían disponibles a dar luz verde a alguien de posiciones más duras como las que ha manifestado la bancada PC, con Sepúlveda como una de sus líderes.
- “Por un lado hay dudas con la que podría ser una configuración representativa de los últimos 30 años, más conservadora; así como también hay dudas de una configuración basada en posturas maximalistas”, afirma una convencional del FA.
- Lo que se requiere para la segunda etapa de la conducción, afirman, es una figura que de garantías de transformaciones profundas (lo que algunos sectores objetan en el caso de Politzer y el PS), pero a la vez con gobernabilidad para poder conducir a buen puerto un proceso complejo de cara a un resultado positivo en el plebiscito de salida (lo que otros cuestionan al PC).
- Por lo mismo, estimaron que el FA, al estar en una posición intermedia entre ambas almas de la izquierda en la Convención, podría dar más garantías a los distintos sectores para tener los apoyos requeridos.
- Al lanzar su opción, Sánchez puso como eje el construir un relato para conseguir el éxito de la propuesta de nueva Constitución en el plebiscito de salida; un tema que inquieta en la Convención, producto de la caída de la confianza ciudadana en el organismo, que repuntó tras el triunfo de Boric.
- La candidatura recayó en Sánchez, pues se estima que su figura podría ser más transversal y despertar menos reticencias en los distintos sectores -lo que reconocen en el PS y el PC-, además de poseer más experiencia política que otras cartas en cuestión.
Por qué importa: El puzzle para armar la testera es complejo y puede tener implicancias para Boric, en su intención de ampliar su gobierno a través del ingreso del PS, sin que ello signifique una tensión con su socio principal, el PC. En los análisis de los constituyentes FA también estuvo sobre la mesa no competir para hacer un gesto brindando espacios a las otras fuerzas aliadas de Boric y el FA y así solidificar esas alianzas.
- Pero el hecho de que las tratativas estén obstruidas debido a las aspiraciones de los distintos colectivos disuadió al FA de esa fórmula, afirman en su colectivo. De todos modos, agregan que lo de Sánchez es una propuesta, sujeta a las negociaciones y al objetivo principal de lograr un acuerdo que reuna a la mayor cantidad de fuerzas de la mayoría de izquierda.
- En el PS aspiraban a tener un apoyo del FA, producto de que ellos se bajaron en la primera elección en noviembre para respaldar la propuesta del FA (Loncón-Bassa). En esa ocasión trasmitieron el mensaje de que esperaban respaldos en el futuro.
- Con argumentos similares, desde el PC les han transmitido que esperan que Sepúlveda pueda jugar un rol relevante en la Convención y que el FA ceda algunos espacios, dado que ella ya quedó fuera de las vicepresidencias adjuntas por la falta de apoyo del FA.
- Las aprensiones han sido recogidas por el FA, y serán parte de las negociaciones. Los frenteamplistas han hecho ver que estiman que las tratativas en la Convención no deben reducirse a una repartición de poder vinculada a la distribución de espacios en un gobierno de Boric y que el objetivo es llegar a la mejor dupla para el éxito de la nueva Constitución en el plebiscito de salida.
- Una vía que han planteado desde el PS es que Sánchez entre solo a la vicepresidencia, a lo que están disponibles en el FA. El tema es que eso dejaría a Sepúlveda fuera de carrera, ya que se estima difícil que se admita a dos figuras de la coalición de Boric (Apruebo Dignidad) dirigiendo la Convención.
- En el PC asumen que por los pesos específicos de cada bancada, ello es una opción, pero esperan que se produzca a través de un acuerdo que asegure algún espacio relevante a Sepúlveda (el FA tiene 16 constituyentes, el PS 15 y el PC 7). (Emol-Ex Ante)
