Meteorología y proyecciones económicas

Meteorología y proyecciones económicas

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Todos los analistas han hecho un ajuste a la baja en las proyecciones del crecimiento del PIB de 2019. Pero, la más relevante son las acciones del Banco Central: una fuerte baja de tasa de interés y una proyección del crecimiento en un rango entre el 2.25% al 2.75%, argumentando el deterioro de las condiciones externas y las bajas expectativas internas, con una inflación bajo su meta.

Pero para lograr esas cifras, Chile debería crecer sobre un 3.0% en el segundo semestre del año; es decir, algo mejor que los últimos meses.

En contextos de alta volatilidad rara vez las proyecciones económicas dan en el clavo; la razón está en una frase atribuida a Keynes, que apunta a que si los datos cambian, cambio el planteamiento.

Por cierto, los datos han cambiado por negativas noticias externas y malas expectativas internas. La pregunta es por qué y para qué se hacen pronósticos tan frágiles; existen elementos que interactúan: uno es la importancia para los actores económicos de bajar la incertidumbre, por lo que demandan análisis sobre el futuro más probable. Otro es que proyectar datos económicos no tiene riesgos, ya que el no acierto, dentro de cierto rango, no es penalizado; en cambio, el acierto es bien recompensado.

Si continúa la guerra comercial vía los tuits del presidente Trump, si el clima político chileno sigue muy contaminado y si los errores no forzados del gobierno prosiguen, es probable que en los próximos meses las proyecciones incluso desciendan más para 2020.

Esto es lo más parecido al pronóstico del huracán Dorian.

 

Hugo Lavados/La Tercera

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