Una serie de diligencias instruyó la Fiscalía Metropolitana Oriente en la causa que indaga un presunto fraude que involucra a la sociedad de inversiones Intervalores Capital. Su gerente general, Gabriel Urenda, hijo del fallecido senador y empresario naviero Beltrán Urenda, declaró la semana pasada en calidad de imputado ante el fiscal Roberto Contreras, de la Unidad de Delitos Económicos.
La indagatoria fue abierta tras la querella presentada por la comercializadora de productos Panor Ltda., sociedad dedicada a la comercialización de azúcar, que acusa los delitos de apropiación indebida, falsificación y uso malicioso de instrumento privado.
También se indaga el delito de estafa.
Según advierte la acción judicial, se le adjudicó a Intervalores Capital la compra de divisas con el objetivo de cumplir con el pago de proveedores; sin embargo, la empresa no habría cumplido. «Es probable que los dineros instruidos hayan sido destinados para fines diversos a los que fueron entregados, lo que ha causado a la fecha un perjuicio superior a los mil millones de pesos», indica la querella.
A esta acción se suman otras tres denuncias que están siendo indagadas por el fiscal Felipe Sepúlveda, quien la semana pasada, junto a funcionarios de la Brigada de Delitos Económicos de la PDI, incautó documentación contable desde las oficinas en Las Condes.
Días antes, Intervalores Capital presentó una denuncia en la fiscalía, en la que habría adjudicado la responsabilidad a uno de los ejecutivos. «El Mercurio» contactó a Gabriel Urenda, quien por ahora declinó referirse al caso. (El Mercurio)



