Es uno de los roles clave de la política mundial. Reservados por naturaleza, lejanos a la vista del público, pero cercanos al poder. Los asesores estrechos de los dirigentes tienen esa característica. Se han hecho series que retratan su mundo, como The West Wing. O se bautiza su área de influencia con nombres que terminan adquiriendo popularidad, como el caso chileno, donde nadie duda de qué se trata cuando se habla del Segundo Piso.
Pero aparte de la admiración y el respeto de los gobernantes hacia ellos, también debe haber amistad y complicidad.
Antes de morir en 2009, Carlos “Cacho” Rubio -asesor que acompañó a Ricardo Lagos en su larga ruta para ser Presidente y fue su jefe de gabinete en sus primeros años en La Moneda– recordaba en una entrevista que tras terminar una ardua jornada en una cumbre en un país centroamericano, pasadas las 12 de la noche, se fueron a bañar en calzoncillos en las tibias aguas de la playa que rodeaba el hotel junto a un whisky.
“Presi…, ¿en serio?”, le contestó Paula Narváez (49) a Michelle Bachelet, el 26 de diciembre pasado, desde Puerto Varas, cuando su exjefa le informaba que había firmado una carta para que ella fuese candidata presidencial del PS. “Sí, pues”, escuchó de vuelta. En el llamado, la expresidenta le subrayó que era tiempo de mujeres y de la importancia de legitimarse en primarias.
Han pasado seis meses de aquel llamado, que fue interpretado como una unción, y la candidatura de Narváez no ha podido sellar unas primarias y tampoco despegar.
Su equipo ha sufrido varios cambios, pero su círculo de confianza se ha mantenido intacto. Este lo encabeza el egresado de Antropología Leopoldo Pineda (ex PPD), quien fue su jefe de gabinete cuando fue ministra y años antes, su pareja. Ambos son puertomontinos.
En marzo de 2018, el nombre de Pineda estuvo en la prensa, cuando presentó su renuncia a su cargo en la Segegob, luego que se conociera del pago de más de $ 28 millones del diputado Sergio Aguiló al Centro de Estudios Cultura Ciudadana, la ONG en la cual Pineda era director.
De ese mismo equipo de sus tiempos de vocera, Narváez reclutó a su entonces jefe de prensa, el periodista Emilio Espinoza, otro de los hombres en que la candidata confía en un 100% y quien ha trabajado con distintas figuras socialistas.
Lo sigue su amiga María Eugenia París, quien lleva su agenda y es como su jefa de gabinete. La “Quena” -como le dicen- fue directora de programación de la segunda administración de Bachelet y junto a Narváez y Ana Lya Uriarte conformaron el círculo de confianza de la exmandataria.
“El círculo de Paula es el mismo que tenía en La Moneda y una de las críticas que se le hacen a su campaña es que su tono es muy ministerial, muy de vocera y no de candidata”, advierte una militante socialista.
Aunque sin un cargo formal, muchos señalan que el marido de la abanderada del PS-PPD, Javier Rico, juega un rol silencioso, pero muy clave, por lo que debería estar en la lista de influyentes.
Cierra este primer anillo Camilo Escalona, líder de la Nueva Izquierda, el sector interno del partido al que pertenece la candidata y quien promovió por primera vez su nombre para los primeros cargos que ocupó en el gobierno regional de Los Lagos.
En otra categoría están las figuras del socialismo con quien Narváez mantiene un contacto estrecho. Ello, considerando la fría relación de su comando con la directiva que preside Álvaro Elizalde. En este grupo están el diputado Manuel Monsalve, su coordinador político; el senador Carlos Montes, quien fue el primero en proponerle que fuese candidata a principios de 2020, y el exministro Osvaldo Andrade.
El fútbol y la Escuela de Derecho de la U. de Chile cruzan el círculo estrecho de Gabriel Boric (35). El conjunto de hombres y mujeres que hoy lo escoltan en su campaña presidencial estudiaron en el edificio de Pío Nono e integraron en algún momento alguno de los dos equipos de balompié en los que militó el diputado magallánico: Club Artesanos del Fútbol y Autonomistas FC.
En el primero, Boric compartió camarín con tres personas de su actual círculo de hierro: el presidente ejecutivo de Espacio Público (EP), Diego Pardow; el académico de la U. Católica de Valparaíso Matías Meza-Lopehandía (40) y Constanza Schönhaut (32), recién electa constituyente.
Pardow (41) suspendió temporalmente sus funciones en EP para dedicarse a tiempo completo a la coordinación de la plataforma programática de Boric, especialmente en el área económica.
Meza-Lopehandía, compañero de curso de Pardow y muy amigos, asesora a Boric en temas laborales y pueblos indígenas.
La camiseta lila de los Autonomistas, en tanto, la vistieron los mismos anteriores, además de Nicolás Grau, otro de los hombres de confianza y “orejeros” del abanderado del Frente Amplio. “Yo no estoy en el comando, pero somos muy amigos con Gabriel y hablamos por WhatsApp una o dos veces a la semana”, señala Grau, profesor de la Facultad de Economía y Negocios de la U. de Chile. “Ganábamos la mayoría de los partidos y lo pasábamos muy bien, lamentablemente hoy ya no se pueden hacer esas cosas”, recuerda Grau sobre esas noches de fútbol en unas canchas en calle Domínica.
La abogada Javiera Cabello no juega al fútbol, pero es parte clave del círculo de hierro de Boric y su jefa de campaña.
Antonia Orellana, José Miguel Ahumada, Javiera Martínez y Maite Gambardella son otros nombres del equipo del diputado que aspira a ganar la primaria a Daniel Jadue. “También conversa mucho con Lucía Dammert (experta en seguridad ciudadana)y Patricia Muñoz (defensora de la Niñez)”, agrega una colaboradora.
Y Grau dice que en la lista de personas claves hoy no se puede dejar fuera a Giorgio Jackson.
Cercanos a Daniel Jadue (53) cuentan que el candidato del PC se ríe cuando en la prensa mencionan como su equipo cercano a un puñado de dirigentes comunistas, entre los que aparecen María Eugenia Puelma (exseremi de Trabajo), Juan Andrés Lagos (dirigente histórico del partido) y Óscar Aroca (exasesor de Rodrigo Peñailillo en Interior), entre otros.
Las mismas fuentes explican que son nombres que habitualmente menciona el secretario general del PC, Lautaro Carmona, al ser consultado por la prensa, pero que están lejos de pertenecer al círculo de confianza del alcalde. “Pero a Jadue no le molesta, porque le sirve para su plan, de mantener en reserva a sus colaboradores más cercanos”.
Quienes conocen al edil coinciden en que es difícil hablar de un equipo cercano a Jadue, porque él toma solo sus decisiones y solo las sociabiliza al pedir ejecutarlas.
Un miembro del PC, que pide mantener su nombre en reserva, da un ejemplo de ese estilo: “El domingo 16 (día de las elecciones) el partido había montado un punto de prensa en el Ical (Instituto de Ciencias Alejandro Lipschutz) para recibir a los periodistas, tras los resultados. Pero esa noche, Jadue, sin previo aviso, no se movió de Recoleta y celebró su triunfo en su comuna. Enterados de ello, Carmona y Lagos partieron corriendo para ponerse detrás del edil en la foto, lo cual molestó a sus cercanos”. El presidente del partido, Guillermo Teillier, en tanto, se quedó solo en el Ical mirando la televisión.
Esa noche, Jadue palpitó, quizás, por primera vez, una posibilidad real de llegar a La Moneda, para lo cual comenzó a preparar equipos. Su plan es integrar a gente del partido, personas del mundo empresarial (ya se ha contactado con hombres de negocios ligados a la comunidad palestina)de independientes del mundo académico.
La Tercera se contactó con Jadue para consultarle sobre sus colaboradores más estrechos, pero se excusó de hablar, tras dar las gracias por el interés.
Según sus cercanos, su círculo de confianza, al que es muy difícil acceder, lo encabeza el exvocero del Frente Patriótico Manuel Rodríguez César Quiroz, su mano derecha y quien le resuelve los temas operativos y cotidianos. El actual secretario comunal del PC en Recoleta ingresó a las Juventudes Comunistas en 1969 y dejó el Frente en 1987, integrándose al Movimiento Patriótico Manuel Rodríguez, extensión que se quedó con el PC.
Quiroz es una persona muy respetada al interior del PC y querida por las generaciones más jóvenes, ya que sus charlas son un punto obligado en todas las escuelas de verano de las JJ.CC. y seminarios de adoctrinamiento. Justamente en una de ellas fue donde conoció hace muchos años a su actual jefe, quien aprecia su consecuencia política.
En este círculo, donde la reserva es parte esencial, está la joven economista Javiera Petersen (PC), directora del Observatorio de Políticas Económicas (Opes); Bárbara Sepúlveda, abogada constitucionalista y activista feminista, recién electa constituyente; la periodista Faride Zerán; el cineasta Hernán Caffiero, quien será el responsable de su franja electoral y otras piezas de campaña, y Keny Oyarzún, académica de la U. de Chile experta en temas de género. Las fuentes consultadas agregan un último nombre: Marisela Santibáñez, la diputada electa por el PRO, pero que fichó por el PC en 2019, quien se ha acercado mucho a Jadue en el último tiempo colaborando con él en varias actividades como presentadora.
Paralelamente, el partido de la hoz y el martillo designó su propia instancia para trabajar con su presidenciable, que coordinan Lautaro Carmona (quien también declinó hablar en esta nota) y la diputada Camila Vallejo, y que está compuesto por siete hombres y siete mujeres.
Cuando se conformó este equipo, se aclaró, eso sí, que este no es el comando de Jadue. No obstante, el economista Fernando Carmona (hijo de Lautaro y parte del grupo de los 14) fue recientemente confirmado como coordinador del programa presidencial.
Jadue ya presentó esta semana la sede de su comando, en una casona de 1924 en el corazón del barrio República, frente al cual busca poner a una mujer independiente. (La Tercera)
