La desaparición de la centro izquierda y los retos de Piñera

La desaparición de la centro izquierda y los retos de Piñera

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Sorpresa parece haber generado el que Beatriz Sánchez esté comenzando a rebasar a Alejandro Guillier en el sector de la izquierda. Se ha señalado que ello no es real, por cuanto la gente que realmente irá a votar optará por Guillier. Pero hay una tendencia sostenida en la caída de la intención de voto de Guillier, por lo que cada vez es más plausible que Guillier   sea desplazado por Sánchez. ¿Cómo es posible que se dé ello?, se preguntará usted, dada la evidencia de la baja votación de Sánchez en las primarias.

La respuesta es simple, y no tiene que ver con la invisibilidad de Guillier, en los temas relevantes, sino que Guillier está disputando con Sánchez los votantes de izquierda dura, y  en dicha pelea Sánchez tiene todas las de ganar. Guillier es un candidato poco afortunado, se ha rodeado de una izquierda dura y poco democrática (el PC apoya las dictaduras de izquierda).

Es verdad que últimamente con su cambio de vocería y su tímido rechazo a la dictadura venezolana está tratando de enmendar el rumbo, pero cada vez que lo ha hecho al rebasarlo Sánchez por la izquierda, vuelve a toar posturas de izquierda más dura (con  la ilusión de disputarle a Sánchez el voto de izquierda más duro). Si usted analiza de esta forma la contienda, entre ambos abanderados, podrá entender lo que hoy está sucediendo con este sector de extrema izquierda.

Guillier, como Sánchez, están por una izquierda sesentera que ha llevado a un país exitoso al fracaso, y ello ya no es posible disimularlo. Por ello es precisamente que en la actualidad los discursos de la izquierda bacheletista no sólo no convencen,  sino que generan rechazo.  Guillier  y Sánchez comparten esta realidad y están desencajados. Su silencio y el cierre de los espacios que antes tenían es una prueba de ello. Esto también explica el que Guillier se ha demorado tanto en conseguir los votos, como candidato independiente, por cuanto el electorado de la Ex – Concertación no está con él, sino con posiciones más de centro. Si usted se paseaba por el Centro podía apreciar la soledad de los lugares de recepción de firmas del candidato independiente.

El último intento sensato de la izquierda de centro era Carolina Gioc, pero la candidata DC ha sido sacrificada –como lo fue en el pasado Soledad Alvear- por su propio partido.   La presidenciable de la DC, a pesar de su cercanía con Palacio,  tiene el mérito de haberse separado de las ideas de la izquierda bacheletista y de haber intentado ocupar el centro político. Sin embargo, su propio partido le ha negado dicha posibilidad. Y lo ha hecho tomando tres medidas. Primero tratando de llevar a Rincón a la reelección como candidato DC (aspecto en el cual Goic salió fortalecida), y ahora, haciendo un pacto con IC y el MAS (haciendo imposible una candidatura de centro que en realidad arrastra en su lista parlamentaria a IC y el MAS), y, finalmente, desdibujando la posibilidad de revisar conforme a estándares éticos la presentación de sus parlamentarios.

El éxito de Piñera, por otra parte, no sólo dependerá de que en la Nueva Mayoría la extrema izquierda se haya tomado todas la candidaturas, sino de las propuestas pro-crecimiento que haga el presidente Piñera, su forma de abordad los problemas de equidad y, sobre todo, que pueda levantar un proyecto masivo e inclusivo.  Lo que el país pide, para salir de la coyuntura económica que ha generado este gobierno, es una fuerte agenda pro-crecimiento, que sea tan potente que no deje la menor duda que saldremos de atolladero económico en que se encuentra. Pero, una vez logrado esto,  lo que el país necesita es un gran proyecto país que genere estabilidad para los próximos veinte años. Un Proyecto que levante una derecha de centro, preocupada del crecimiento, pero también de la equidad y sobre todo, profundamente respetuosa de los derechos fundamentales.  Si estos dos retos son abordados con fuerza por el presidente Piñera, lo pondría en la Moneda rápidamente y, sobre todo, en un lugar muy destacado de la historia de Chile. (La Tercera)

 Rodrigo Barcia

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