Gobernador del Biobío y E. de excepción: «Proteger 22 mil kms. de...

Gobernador del Biobío y E. de excepción: «Proteger 22 mil kms. de rutas es irreal»

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El gobernador regional del Biobío, Rodrigo Díaz, criticó el debate generado en torno a la ampliación o no del estado de excepción constitucional que rige en la provincia de Arauco, Biobío y en la Región de La Araucanía, cuestionando la idea de la oposición y parte del oficialismo de aumentar el control militar en las rutas de esas zonas.

Tras sostener una reunión con el Presidente Gabriel Boric en el Palacio de La Moneda, en la cual le entregó una serie de propuestas para enfrentar la violencia en su región, la autoridad recordó que «los kilómetros que tiene la Región del Biobío y la Región de La Araucanía son del orden de los 22 mil kilómetros de rutas».

«Es físicamente imposible hablar de que va a haber una protección en todos y cada uno de esos 22 mil kilómetros, porque no existen fuerzas en el Estado para poder ejercer una acción de esa magnitud. Las personas que vivimos en las regiones tenemos una opinión porque conocemos los lugares donde vivimos», añadió.

En esa línea, Díaz recalcó que «la discusión política de si el estado de excepción va a generar un nivel de protección en todos los caminos es una discusión irreal (…) cuando yo veo la disputa entre parlamentarios o que se trata de generar con autoridades políticas del Gobierno, veo que hay una parte que no se contempla».

«El estado de excepción es pertinente, el decreto es el mismo que se ha señalado siempre y lo que se debe hacer es una adecuada planificación de los medios para poder proteger aquellos lugares donde hay tránsito de personas», agregó junto con recalcar que «esto de tener protección en 22 mil kilómetros de rutas es irreal».

El gobernador subrayó que «lo quiero decir con todas sus letras y quien diga otra cosa parece que no conoce el territorio (…) este es un problema extremadamente complejo y aquí parte de la discusión nacional es un gallito de fuerza, pero no va a atender los problemas de fondo y por eso es que he venido a entregar una propuesta«.

Asimismo, el jefe regional sostuvo que para una mayor efectividad de la presencia militar se requiere «una planificación y coordinación adecuada para que exista seguridad en todo el territorio y eso nos debe llevar a una reflexión muy profunda. Yo creo y exijo para los habitantes de la Región del Biobío mayor seguridad».

A su juicio, la idea es abordar la situación «desde el trabajo real y no desde la cuña que pretende buscar una solución a un problema que en parte está formado por la existencia de un problema que tiene nuestro Estado con las comunidades mapuche, pero que también es una zona donde hay crimen organizado«.

ACOTADA BAJA

“No desestimamos que podamos evaluar algunas carreteras o rutas en donde esta labor preventiva se pueda extender”. De esta manera, la ministra del Interior, Izkia Siches, abrió una puerta para que se extienda el estado de excepción que cumplen las Fuerzas Armadas (FF.AA.) en las regiones del Biobío y La Araucanía, en medio del peor hecho de violencia registrado en la zona: la muerte de Segundo Catril Neculqueo, tras un atentado en Capitán Pasten.

La ministra señaló en Radio Cooperativa que el gobierno está abierto a evaluar escenarios, idea que también planteó a los representantes de las policías y las FF.AA., en una reunión que sostuvo, junto a la ministra de Defensa, Maya Fernández, esta mañana en La Moneda.

Según explicaron asistentes a esta cita, las representantes del gobierno se mostraron conforme a los resultados del estado de excepción “acotado” impulsado por el Ejecutivo, desde el martes 18 de mayo en la denominada Macrozona Sur. Y claro, a pesar de las reticencias iniciales de La Moneda por aplicar esta estrategia, los delitos asociados a la violencia rural se han visto reducidos.

Aunque la baja -en términos porcentuales- no es muy alta, entre policías, efectivos de las FF.AA. y el gobierno igual hay conformidad ante las cifras. De todas maneras, entre los uniformados deslizan que el solo hecho de ser un estado de excepción “acotado” en las rutas principales de la zona, hacian prever que la reducción de los delitos fuera menor.

¿Qué dicen las cifras? Según datos que maneja Carabineros, y que fueron sociabilizados con el gobierno y las FF.AA., entre el 18 de mayo y el 24 de mayo, se registraron 23 eventos violentos asociados a la violencia rural. En ese mismo periodo hubo 11 personas detenidas, de las cuales cuatro fueron detenidas en un día.

En cuantos a los hechos de violencia rural ocurridos, entre el 12 y el 17 de mayo, se registraron en la Macrozona Sur, 34 eventos de este tipo, entre los cuales destacan cortes de ruta, ataques incendiarios y usurpaciones. Si se compara el periodo de tiempo con estado de excepción “acotado” y sin esta medida, se evidencia una baja de un 32% en los ilícitos.

Los detenidos también vieron un incremento. Si con estado de excepción fueron 11 los arrestados, durante la semana anterior -sin FF.AA. en las rutas- solo se aprehendieron sies personas entre el Biobío y La Araucanía. Esta es una de prioridades de la estrategia en la zona: sacar de circulación a quienes tienen órdenes de detención pendiente, durante las fiscalizaciones en que las Fuerzas Armadas apoyan a las policías.

Ayer el Ejecutivo ya daba algunas luces de la baja en los delitos. El subsecretario Manuel Monsalve dijo que “hasta ahora los Estados de excepción han demostrado que disminuyen los hechos de violencia, es cierto eso (pero) también han demostrado que no pueden evitar el asesinato de personas y por eso es que quiero reiterar: si no queremos que nadie muera, si no queremos tener víctimas, el estado de excepción por si solo no es suficiente”.

DESPLIEGUE

Entre los policías que se mueven por la Macrozona Sur señalan que la medida de control militar en las rutas está reducida a las rutas grandes, en las principales carreteras.

Por ejemplo, en el caso de La Araucanía, los efectivos del Ejército, realizan, principalmente, controles en la Ruta 5 Sur, en compañía de Carabineros. Se hacen “patrullas mixtas” para hacer estas fiscalizaciones, pero, a diferencia de lo que ocurría en el estado de excepción pasado, ya no concurren a zonas rurales confictivas para hacer labores de prevención.

En ese sentido, explican que las labores que se hacían en distintos puntos estratégicos de La Araucanía, servían para disuadir “con la presencia” a los grupos más violentos y así evitar movimientos que apunten a atentados más graves. Una fuente militar advierte que en zona hay más de 1.200 caminos interurbanos que facilitan los desplazamientos de los grupos más violentos.

Por ejemplo, explican, en el caso del Biobío, los funcionarios de la Armada, a veces solo están apostados en la Ruta 160, y no en las carreteras R-60 y R-72, reconocidas por ser un permanente foco de conflicto. En esa misma línea, agregan que el que exista un estado de excepción “acotado”, deja a los uniformados a uno 60 kilómetros de “zonas rojas”, como Tirúa y Cañete. (Emol-La Tercera)

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