Gbno. dice que acuerdo nacional es «un deber»: fondo sería de US$...

Gbno. dice que acuerdo nacional es «un deber»: fondo sería de US$ 12 mil mills.

Compartir

En el marco del anuncio del pago de la primera cuota del Ingreso Familiar de Emergencia, el presidente de la República, Sebastián Piñera, destacó la importancia de llegar a un acuerdo nacional de manera de pavimentar el camino para la anhelada reactivación económica.

«Se está trabajando muy duro para que este acuerdo que es tan necesario y urgente pueda concretarse y ver la luz del sol en los próximos días”, dijo el jefe de Estado desde el palacio de La Moneda.

En esa línea, llamó a los distintos actores a estar “a la altura del compromiso, de los desafíos y también de lo que necesitan nuestros compatriotas».

Esto, porque para el Presidente resulta necesario “estar preparados para poner en marcha nuestra economía apenas las condiciones sanitarias lo permitan. Se necesita una economía sana y fuerte para tener una red de protección social sana y fuerte”, dijo.

En medio de las tratativas por llegar a un acuerdo por un plan de emergencia, la ministra vocera de Gobierno, Karla Rubilar, indicó este miércoles que alcanzar dicho consenso es «un deber», llamando de paso a la oposición a que haga «el máximo esfuerzo» para alcanzarlo.

Esto luego que desde la oposición se mostraran críticos ante algunas de las propuestas que ha hecho el Ejecutivo, en medio de las negociaciones que llevan adelante parlamentarios de las comisiones de Hacienda, junto al titular de la cartera, Ignacio Briones, y que deberían concluir esta semana.

«Como este esfuerzo y esta semana es crucial para efectivamente probarle a la ciudadanía que sí somos capaces de estar a la altura cuando más nos requieren, es que hemos ido dialogando y conversando. Entendemos que en ese marco hay temas tan relevantes como, por ejemplo, el ingreso familiar de emergencia, si lo vamos a aumentar, cuánto vamos a aumentar la cobertura, qué va a pasar con los tramos, son las discusiones que estamos generando y hay diferentes posturas», sostuvo.

Con esto, la ministra recordó que «la voluntad del Gobierno siempre, desde el minuto que el Presidente hizo este llamado, es llegar a un acuerdo, pero no se les olvide que es llegar a un acuerdo en las dos caras de una misma moneda, extremadamente importante hoy para la ciudadanía, que es la protección (de las familias) y la reactivación» de la economía.

A su juicio, «cuando uno habla de economía y de reactivación uno habla de personas, habla de ingresos de las personas (…) son dos caras de una misma moneda trascendental donde debemos ponernos de acuerdo. El acuerdo no es una opción, el acuerdo hoy para las autoridades, dado que estamos en una emergencia, es un deber y es vital, vital que lo entendemos».

Asimismo, enfatizó que «todos los esfuerzos que nosotros como Gobierno podamos hacer los vamos a hacer, esperamos que la oposición también los haga, porque para llegar a acuerdo hay que tener voluntad de ambas partes y recordemos que estamos pasando por momentos muy difíciles sanitarios y económicos. Por eso, es tan relevante que lo que pidamos, lo que queremos poner sobre la mesa también tenga sentido de realidad, de posibilidad, si siempre pedimos lo imposible no hay ninguna posibilidad de llegar a acuerdo».

«Así que nuestro llamado es que nosotros (como Gobierno) hagamos la máximo esfuerzo y que la oposición también haga el máximo esfuerzo para llegar a acuerdo», precisó. Más tarde, durante una actividad sobre el inicio del pago del Ingreso Familiar de Emergencia a nuevos beneficiarios, el Presidente Sebastián Piñera, indicó que «estamos trabajando muy duro para que este esfuerzo que están necesario y urgente, pueda concretarse y ver la luz del sol durante los próximos días (…) Yo tengo mucha confianza en que la sociedad chilena y especialmente los que tenemos cargos de elección popular y ejercemos liderazgos, vamos a saber estar a la altura».

ACUERDO DE ECONOMISTAS EN US$12 MIL MILLONES

A partir de las 10.30 horas de hoy continuaron las reuniones en el Congreso que buscan acordar con el Gobierno un plan de emergencia para la protección de los ingresos y la reactivación económica y del empleo.

Tras varias horas de discusión, el presidente de la comisión de Hacienda del Senado, Jorge Pizarro, entregó detalles de los conversado y sostuvo que «hoy tuvimos una larga reunión de trabajo donde tuvimos la oportunidad de escuchar las propuestas que han trabajo un grupo importante de economistas, expertos de nuestro país de distintas sensibilidades y que han tenido altas responsabilidades en el sector público y privado».

Así, el parlamentario afirmó que dichos expertos «fueron capaces de llegar a algunos acuerdos en la materia de enfrentar a través de un plan especial la emergencia sanitaria», agregando que dentro de ello «me pareció muy interesante la creación de un fondo de US$12 mil millones que se puedan dedicar exclusivamente a enfrentar la emergencia».

El monto citado por Pizarro es el mismo que ha estado impulsando la oposición durante esta discusión, el cual surgió inicialmente tras las propuestas deslizadas en mayo por destacados economistas convocados por el Colegio Médico. Cifra que se contrapone al fondo de US$10 mil millones que puso sobre la mesa el Ejecutivo para negociar.

El Gobierno propuso la utilización de ese monto en un horizonte de 20 meses, en donde US$3 mil millones se destinarían para financiar medidas este año, mientras que los US$7 mil millones restantes se utilizarían el próximo año y hasta febrero de 2022.

Además, la propuesta de La Moneda contempla aumentar el monto y la extensión del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE), entre otras cosas.

Desde la oposición, en tanto, junto con pedir aumentar el fondo en US$2 mil millones más, critican la idea de que parte del financiamiento de ello venga de reasignaciones presupuestarios, y exigen que la cifra del IFE supere la línea de la pobreza.

Según Pizarro, los US$12 millones que habrían acordado durante la instancia de hoy economistas de diversos sectores, servirán para llegar con «ayuda oportuna y eficaz a las familias y a las personas, junto con también empezar desde ya a trabajar en lo que va a ser la reactivación de la economía de nuestro país, fundamentalmente priorizando la generación de empleo».

«Espero que, junto con las otras visiones y propuestas que hemos planteado cada uno de nosotros, podamos de aquí a unas 48 horas tener ya una propuesta que ojalá concite un acuerdo muy amplio, porque los chilenos y las familias lo necesitan», acotó.

EL ACUERDO EN LA OCDE

El panorama que proyecta la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), tanto para Chile como para el mundo este año, es sombrío. En su informe de Perspectivas Económicas publicado hoy, el foro reveló que prevé un desplome de 5,6% para el Producto Interno Bruto (PIB) nacional este año si la pandemia sigue su curso actual, pero una contracción de 7,1% en el caso de que haya un segundo brote antes de fin de año.

El director del Departamento de Economía de la OCDE, Álvaro Pereira, señaló que el Covid-19 corresponde a la «peor crisis sanitaria y económica al menos desde la Segunda Guerra Mundial».

Pereira participó en el seminario «El camino a la recuperación», organizado por el Centro de Estudios Públicos (CEP) y en el que compartió con el presidente de la Comisión Nacional de Productividad (CNP), Raphael Bergoeing; el embajador de Chile ante la OCDE, Felipe Morandé; y el director del CEP, Leonidas Montes.

Bergoeing advirtió el escenario para la economía chilena que «va a ser bastante peor que lo que pensábamos hace solo ocho semanas».

En cuanto al informe de la OCDE, el también académico académico de la Universidad Diego Portales (UDP) señaló que la caída de la inversión de 15% que proyecta la entidad si hay un rebrote «puede ser bastante peor», considerando que en la crisis financiera la inversión cayó alrededor de 18% con una contracción del PIB de 1%, mientras que en 1999, en la crisis asiática, con una contracción similar del Producto, la formación bruta de capital fijo se desplomó más de 20% en algunos trimestres.

«Me preocupa que lo que vemos en el futuro, potenciado, lamentablemente, por el problema que ya veníamos arrastrando nosotros desde octubre, es una caída bastante mayor en la inversión», aseguró.

Pereira, en tanto, advirtió que «la recuperación será lenta y con efectos duraderos», y agregó que «al final de 2021 la economía todavía no estará en la misma posición que estaba en 2019″.

RECOMENDACIONES

Ambos expertos coincidieron en la importancia de los acuerdos políticos para la recuperación. El representante de la OCDE afirmó que «sería una buena señal que ustedes alcanzaran ese consenso. La gente puede tener distintas políticas en el futuro, pero para ayudar a las PYME, a los más vulnerables, a los jóvenes, que van a ser de los más afectados».

Bergoeing, en tanto, dijo que «el acuerdo que estaría alcanzando el gobierno con el mundo político y un grupo transversal de economistas permite ver algo de luz al final del túnel«.

Además, Pereira señaló que «sabemos que hay conversaciones entre el gobierno y los partidos para que pueda haber aún más ayuda. Pensamos que es importante continuar, reforzar el sistema sanitario y recursos adicionales para respaldar a los más vulnerables. Proyectamos que dentro de 3 a 5 meses, cuando los efectos de la pandemia sean más grandes, puede haber insolvencia, por lo que es muy importante respaldar a las empresas chilenas».

Y aunque destacó que el gobierno y el Banco Central ya han aplicado políticas para ayudar a los trabajadores informales y que el crédito fluya en la economía, advirtió que es posible que en el futuro sean necesarias más acciones en esa línea y para mantener la liquidez de las empresas.

Según Pereira, Chile puede volver a crecer a un ritmo de 3% a 4%, pero para eso «en la fase de recuperación tiene que haber reformas».

«Modernizar aún más el sistema fiscal, el sistema de pensiones, por el diálogo que ha avanzado con la crisis social, y Chile todavía no es muy amigo de la inversión. La burocracia es demasiado grande, no importa si es de izquierda o de derecha, no es buena para la inversión y ni para el empleo«, dijo.

Además, el economista recomendó que «parte de la recuperación y del crecimiento económico que Chile puede tener en los próximos años es exactamente invirtiendo en infraestructura digital y también logística, que es fundamental para disminuir las desigualdades del país».

Bergoeing, en tanto, aseguró que «tenemos que avanzar hacia un confinamiento inteligente que permita la potenciar la recuperación, porque claramente el regreso va a ser en paralelo. Si bien hayamos contenido la expansión de la pandemia, nadie espera que sea completamente eliminada durante los próximos 12 meses y al mismo tiempo tenemos que ser capaces de recuperarnos. Si no, los problemas económicos van a matar y van a matar por hambre«.

Para financiar dicha recuperación, a su juicio «se va a requerir bastante más dinero fiscal que el que hoy hemos comprometido«. Y además, explicó que la misma va a depender fundamentalmente de lo que ocurra en el sector privado, en el que trabajan más de 7 millones de personas. «La recuperación depende del sector privado en términos de empleo, inversión y eficiencia», dijo.

Cuando comience el proceso de recuperación, destacó que los subsidios a la contratación son una «herramienta muy potente» para impulsar el empleo, y destacó también la importancia de plantear incentivos a la inversión.

Además, Bergoeing puntualizó que «Chile había superado de alguna manera el problema macro. Lamentablemente a fines del año pasado aparecieron una serie de desafíos en el país que cuestionan eso. Hay que recuperar la estabilidad macro, hay que volver a generar una confianza agregada que permita empezar a pensarse a largo plazo para generar las condiciones que permitan hacer ruido a nivel micro: innovar, arriesgarse, etc».

Un acuerdo entre el mundo político, según el experto, puede ayudar a recuperar «un pedacito de esa estabilidad macro que nos habíamos ganado durante varias décadas y vamos a generar un camino un poquito más fácil de transcurrir».

CHILE EN LA OCDE

Desde París, el embajador Morandé comentó que si bien «la coyuntura actual no da para celebraciones», destacó que «la OCDE nos sirve más que nunca como país», dado el contexto actual generado por la pandemia.

«Los efectos del Covid no son solamente los efectos sobre la economía, sino también los efectos que se vislumbran hacia adelante, porque muchos señalan que el mundo y la economía del mundo no van a ser los mismos cuando esta pandemia sea superada«, explicó, agregando que «ser parte de la OCDE es una cuestión fundamental».

En cuanto a las acciones que está realizando Chile actualmente, señaló que los esfuerzos actuales servirán «no solamente para salir de los efectos de esta pandemia sino para retomar una ruta un poco más positiva y más optimista de que podemos lograr grandes metas», para lo que considera que el apoyo que puede brindar el organismo multilateral es fundamental.

«Estamos hoy día conmemorando nuestro décimo aniversario (desde que Chile ingresó a la OCDE) y es un motivo para estar tranquilos y orgullosos de que podemos aprovechar esta instancia», concluyó. (Emol-DF)

Dejar una respuesta