La Fiscalía Metropolitana Oriente confirmó que, por el momento, se descarta la realización de torturas y apremios al interior de la comisaría policial ubicada en la estación de Metro Baquedano.
La indagatoria quedó a cargo del persecutor Omar Mérida, quien visitó el recinto a eso de las 12:30 de este miércoles. «No se pudo verificar la presencia de ningún detenido, tampoco de ninguna sala que se correspondiese con lo señalado en la referida denuncia. Esto es que fuese utilizada para fines de tortura o que tuviera elementos que pudieran indicar que se utiliza para ese fin. Tampoco se pudo verificar algún residuo de las personas que hayan sido lesionadas o hayan estado al interior«, explicó.
«Lo que yo observé no tiene características que se puedan atribuir a un centro de torturas o a lugares donde se haya ejercido violencia, dijo el Fiscal Oriente, Omar Mérida. Y recalcó:»De la inspección realizada no aparecen elementos que sugieran un elemento de dichas características «.
Pese a ello, señaló que la investigación se mantiene vigente y que entre diligencias pendientes está revisión de cámaras al interior de los calabozos y toma de declaraciones. «Naturalmente que esta es la primera etapa de la investigación y tienen que realizarse muchas más diligencias, tengo que entrevistarme con las víctimas, los funcionarios de turno», explicó.
En el caso de las presuntas víctimas, acotó, «primero tengo que ubicarlas y entrevistarlas. Es importante que uno cuando entreviste a una persona tenga una noción física de los lugares que describe. Por esa razón fuimos primero al lugar, conocemos las instalaciones, las verificamos y a partir de la entrevista vamos cotejando estas declaraciones».
«Lo que yo observé no tiene características que se puedan atribuir a un centro de torturas o a lugares donde se haya ejercido violencia (…) Revisé cada una de las dependencias, los calabozos, y no encontré situaciones que significaron una irregularidad», concluyó Mérida.
Los antecedentes del caso llegaron a manos del Ministerio Público luego que un estudiante presentara un amparo preventivo denunciando, entre otras cosas, que en el lugar se mantenía personas colgadas desde el techo.
Por ello, los jueces del 7° Juzgado de Garantía de Santiago Daniel Urrutia y Darwin Bratti, junto a personal de la Brigada de Derechos Humanos de la Policía de Investigaciones (PDI) concurrieron esta madrugada a la estación para realizar diligencias. Sin embargo, y ante lo encontrado en el lugar, la acción fue rechazada.
«Accedimos a cada una de las dependencias del Metro y de la comisaría, revisamos cámaras de seguridad y accesos sin poder verificar la efectividad de la denuncia. No encontramos detenidos ni vestigios de que hayan sido ocupadas las celdas. En virtud de esto no fue posible acoger ningún tipo de amparo», señaló Bratti.(Emol)
