Aunque no serán parte de las elecciones, Evelyn Matthei y José Antonio Kast, estarán inevitablemente atentos al resultado de la primaria que se realizará este domingo 29 de junio. Comicios de los cuales saldrá el candidato único del oficialismo que deberán enfrentar en el mes de noviembre.
En la oposición creen que la definición estará entre Carolina Tohá (Socialismo Democrático) y Jeannette Jara (PC), quienes corren con ventaja frente a Gonzalo Winter y Jaime Mulet. Aquello abre dos escenarios distintos, ante los cuales tanto el comando de la abanderada de Chile Vamos, como el del postulante del Partido Republicano, ya han diseñado sus estrategias.
En el caso de Matthei, ha hecho algunos ajustes en sus equipos, uno de los más recientes fue poner fin al sistema de vocerías -con 11 portavoces- que estrenó en abril. Buscando terminar con los ruidos al interior de Chile Vamos, la ex alcaldesa decidió pedir a los alcaldes dedicarse a lo territorial y a los parlamentarios a su reelección. Será su jefe de campaña, Diego Paulsen, quien concentrará las vocerías.
Además, Matthei comenzó esta semana a activar «el músculo territorial» de las mujeres que apoyan su candidatura, tratando de llegar al «voto mujer» y el cual disputará con Tohá o con Jara. La idea es posicionar su figura como la alternativa con más calle y conexión real con ese mundo. «Quiero decirles que voy a gobernar con las mujeres en la cabeza y en el corazón», dijo la noche del miércoles durante una actividad en Huechuraba, donde presentó una serie de medidas en apoyo a este grupo.
En lo que respecta a Kast, éste ha sido tajante en señalar que «quien llegue (del oficialismo) nos es indiferente, nuestro plan y objetivo sigue siendo el mismo, recuperar Chile». Es que desde republicanos aseguran que su «hoja de ruta» no se alterará frente a uno u otro candidato y seguirán presentando las propuestas de su eventual gobierno de manera semanal.
Por lo demás, Kast superó por primera vez a Matthei en la última Cadem que se conoció antes de la veda de las encuestas. Y aunque sólo fue por un punto, encendió la alerta en Chile Vamos. Pese a ello, en el partido han sincerado que su misión es «ganarle al comunismo» en el mes de diciembre, dejando al descubierto su convencimiento de que será finalmente Jara su contrincante.
Y si bien apuestan a seguir con su libreto, en la tienda reconocen que se intensificará el trabajo en terreno, una vez que tengan sus candidatos parlamentarios firmes. Además, en las próximas semanas el Partido Republicano podría concretar la inscripción de la precandidatura de Kast, ante el Servel. Aquello les permitirá pasar a una nueva etapa de campaña, como ya lo hizo Matthei al preinscribirse hace algunas semanas.
LOS ESCENARIOS QUE SE ABREN
Bajo ese contexto, los expertos difieren sobre qué escenario es más favorable para Matthei o para Kast, es decir, quién le conviene a ellos que gane la primaria oficialista. El director del Centro de Políticas Públicas de la Universidad del Desarrollo, Gonzalo Müller, consideró que «para Kast y Matthei es la oportunidad de empezar a emplazar y generar contraste con la candidata del gobierno, algo que no han podido hacer hasta ahora y que ha llevado a que la competencia se centre entre ellos».
No obstante, Müller dijo a Emol que «no creo que marque mucha diferencia si gana Jara o Toha, salvo que con Jara se abre la puerta a un retroceso en materia de polarización».
Por su parte, el académico de la Universidad de Talca, Mauricio Morales, opinó que «para ambos es, en teoría, más fácil enfrentar a Jara que a Tohá. Sin embargo, no se pueden confiar. Si gana Jara y logra reunir al tercio de apoyo que hoy tiene el gobierno, se encontrará en condiciones de avanzar a la segunda vuelta, eliminando a Kast o Matthei».
En cambio, Morales apuntó que «si gana Tohá, la situación se torna más difícil para proyectar una segunda vuelta entre Kast y Matthei, pero eso dependerá de la capacidad de Tohá para evitar la emergencia de una candidatura de izquierda como la de Mundaca. Si no lo consigue, entonces puede que un triunfo de Tohá termine favoreciendo tanto a Kast como a Matthei».
Ricardo Hernández, coordinador del programa de Política y Sociedad del Instituto Res Publica, sostuvo que «gane quién gane en la primaria oficialista, tanto José Antonio Kast como Evelyn Matthei enfrentarán un desafío común: Una alianza de gobierno compuesta por el Frente Amplio, el Partido Comunista y lo que se ha denominado Socialismo Democrático, bloque de izquierda que podría aglutinar cerca del 30% de apoyo que actualmente obtiene el Presidente Boric y que debería posicionar a la candidatura oficialista en el primer lugar de la carrera, lo que no se ha visto en los sondeos hasta el momento».
Sin embargo, Hernández manifestó que de «ganar la candidata del Partido Comunista, Jeannette Jara, es probable que se produzca un vacío en el centro político, que podría inclinarse por la candidatura de centroderecha de Evelyn Matthei. Al contrario, en caso de ganar Carolina Tohá, disputará una parte del electorado de centro que también es buscado por Matthei. Este último escenario podría beneficiar al líder republicano, José Antonio Kast de cara a la primera vuelta presidencial».
En tanto, el analista político de la Universidad Autónoma, Tomás Duval, comentó ayer en EmolTV que «si gana Jara como estoy pensando, quien va a crecer es José Antonio Kast en lo inmediato, porque vamos a ver una disputa. Kast no se tiene que declarar opositor a este gobierno todo mundo sabe lo que es y en lo que está, por tanto, esa consistencia y coherencia la mantiene».
Lo anterior, según Duval, «va a complicar en el escenario a Matthei, Matthei que ha tenido problemas estratégicos en su campaña. Va a ser muy complejo cómo ella logra estratégicamente situarse en este escenario. Y no descarto que además surjan otras figuras que hoy están juntando firmas que puedan ser relevantes en estas decisiones».
Como sea, en la oposición hay quienes creen que será clave también la participación que logre convocar la primaria, así como la diferencia de votos entre el primer y segundo lugar. Dos aspectos que podrían cambiar el panorama. (Emol)