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Comité Central del PS reelige a Elizalde como presidente y deja dos cupos para la disidencia

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Hubo peticiones y mucha expectativa, pero no hubo sorpresas de último minuto. Este sábado, el Comité Central del Partido Socialista decidió, con 78 votos de los 103 miembros acreduradis, reelegir en su puesto al actual presidente de la colectividad, el senador Álvaro Elizalde.

El exministro tenía de su lado una amplia mayoría de los 110 miembros de la instancia y, de acuerdo a los cómputos de la elección -realizada el pasado 26 de mayo-, su lista logró más de dos tercios de los votos. Sin embargo, hasta último minuto la tensión se instaló debido a la controversia con la lista rival, encabezada por la diputada Maya Fernández, debido a que ésta solicitaba al actual timonel que hiciera un gesto y dejara su puesto.

De hecho, apenas iniciada la reunión, el exministro Germán Correa -integrante de la lista de Fernández- presentó una moción apuntando a una mesa unitaria. Sin embargo, ésta finalmente no se votó y la disidencia optó por retirarse de la sala y marginarse de la directiva.

La razón detrás de los cuestionamientos era las denuncias de irregularidades en el padrón de los comicios, que apuntaban en especial a una comuna: San Ramón, considerado un reducto de los hermanos Aguilera, Miguel Ángel y Mónica. Aunque el primero -quien es alcalde de la comuna- renunció al PS en 2017 en medio de acusaciones que incluso lo vinculaban con narcotraficantes, su hermana compitió en la elección como parte de la lista de Elizalde y obtuvo un amplio respaldo en su territorio.

Esa situación, más la demora en el conteo de los votos, desató una fuerte polémica interna, con denuncias y críticas cruzadas que se han mantenido durante el último mes y medio.

La composición de la directiva

Con todo, el resultado en la instancia reunida en la sede del Congreso Nacional en Santiago ratificó el triunfo de Elizalde, mientras que la composición de la mesa se convirtió en un factor a observar en medio de la crisis.

Esto, porque la tradición en el PS es que la directiva sea integrada, es decir, que incluya a figuras de las listas que competían contra la que ganó. Así, la decisión del oficialismo fue no llenar los dos cupos que le corresponderían a la disidencia, dejando una puerta abierta para una potencial incorporación.

 

La Tercera/Agencias

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