Rechazada resultó la censura que impulsó el diputado Pablo Lorenzini (ex DC) en contra de su par comunista y presidente de la comisión de Hacienda, Daniel Núñez.
Al realizarse la votación resultó que el único voto a favor que tuvo la acción fue la del ex falangista, mientras que la oposición rechazó (6 votos) y los legisladores de Chile Vamos se abstuvieron en bloque, con otros seis votos. Esto permitió la continuidad de Núñez en el puesto.
Según explicó Lorenzini, su idea de censurar al presidente de la instancia se debía a que se tenía que promover la rotación en el puesto, recordando que era una tradición desde 1990, sin embargo, desde el año pasado él se ha mantenido en el puesto.
Mientras que el apuntado diputado del PC aseguró que no había ninguna justificación para censurarlo, y al iniciar la sesión ofreció un discurso que molestó a sus pares de Chile Vamos, por las críticas que le hizo al Gobierno.
Según dijo Núñez, al sumir el cargo «me propuse romper el cerco oligárquico para aportar a la democratización del debate económico, donde parecía que los únicos que podían opinar eran aquellos personajes que gozan del poder del capital o aquellos tecnócratas a que le siguen el amén».
Y acompañado por otros diputados de su partido, como Karol Cariola y Amaro Labra, recalcó que como presidente «me esmeré en debatir leyes que beneficiarían a los súper ricos, esos que nunca pierden y siempre ganan como fue la reforma tributaria que defendió el ex ministro Felipe Larrraín«.
Ante eso los diputados oficialistas reaccionaron con molestia y dijeron estar «sorprendidos» por el tono de sus palabras, sobre todo porque estas sonaban a una despedida. Además apuntaron a sus «ideas nefastas» y aseguraron que su discurso fue «violento y lleno de odio».
«Seguramente creyó que íbamos a actuar en forma oportunista porque con nuestros votos más el del diputado Lorinzini se habría logrado la censura», dijo el diputado Gastón von Mühlenbrock, quien como todos los demás del sector, se abstuvo.
Entre los argumentos para ello, señalaron que en esta instancia no se cuestionaban sus ideas y aunque lo acusaron de «provocador» declararon que él «ha permitido un debate ecuánime y siempre con el debido respeto a quienes piensan diferente«, por lo que no existiría mérito para sacarlo. (Emol)
