Crear conciencia a nivel ciudadano sobre el tema del calentamiento global y sus efectos es uno de los principales objetivos del Encuentro de las Américas Frente al Cambio Climático, que se desarrolló en Bogotá hasta el miércoles 23 de septiembre.
En la actividad, impulsada por la alcaldía mayor de esa ciudad, encabezada por su titular, Gustavo Petro, participaron 100 invitados internacionales, en 50 seminarios especializados en temas como agua, ciudad, basura y responsabilidad social, movilizaciones masivas, y la suscripción de un documento de intenciones orientado a la preparación, mitigación y adaptación al cambio climático.
El encuentro es considerado por sus organizadores una de las mayores actividades masivas previo a la cita de París de la Cop 21 de Cambio Climático, donde debe definirse un tratado que establezca reducciones efectivas de las emisiones de dióxido de carbono por parte de los países para evitar que la temperatura global aumente más allá de los 2 grados centígrados de aquí a fin de siglo.
Colombia recibe esta cumbre en medio de un período de escasez de lluvias atribuida a la presencia del fenómeno de El Niño y que ya está provocando restricciones en el suministro de agua en al menos un centenar de municipios.
Una de las actividades clave de la jornada es el llamado «Día sin carro», programado para el miércoles y durante el cual más de un millón de personas abandonaron sus automóviles y motos y los reemplazaron por bicicletas. La actividad ya se ha vuelto una tradición en Bogotá, y la última vez que se realizó, en abril pasado, se logró una reducción de 15% en las emisiones de material particulado grueso y de 2,6% en el caso del particulado más fino, o PM2,5.
Al término de la cita se suscribió la Carta de Bogotá, documento que establece una posición sobre los temas que se debatieron durante el encuentro y su impacto local, regional e internacional.
