ChV emplaza al oficialismo a no seguir postergando tema constituyente

ChV emplaza al oficialismo a no seguir postergando tema constituyente

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La llave la tiene el Presidente Gabriel Boric. En él, dicen algunos en el Socialismo Democrático, está la clave para destrabar el acuerdo constitucional y evitar que el tema fracase y termine, una vez más, guardado en un cajón hasta que el problema constitucional explote otra vez. Y la solución que creen más viable es que todo decante en un órgano mixto, aunque algunos no pierden el interés en que sea designado.

El problema, dicen los dirigentes de esa coalición, es que Apruebo Dignidad sigue firme en no soltar la idea de un órgano redactor 100% electo. A medida que han avanzado las negociaciones, esa intransigencia se ha transformado en la piedra de tope del acuerdo.

En este escenario, los negociadores de Socialismo Democrático apuntan su mirada directamente al Jefe de Estado. Son varios los que en ese sector, en privado, comentan que llegó el momento de que el Mandatario ordene el asunto. La urgencia, dicen, es que las negociaciones por el acuerdo constituyente están a un paso de llegar a un punto muerto.

Ese es el escenario que todos quieren evitar. Todos, sin excepciones, desde la UDI hasta el PC. Sin embargo, el estado de las conversaciones hacen cada vez más difícil que salga humo blanco del pacto que habilitará el proceso constituyente 2.0.

Hasta ahora, los partidos tienen cuatro propuestas de mecanismo sobre la mesa: órgano de 99 electos (oficialismo y la DC), instancia redactora de 50 personas electas como el Senado (Chile Vamos), órgano de 60 integrantes electas (Demócratas) y una instancia redactora de expertos designados por el Congreso (Amarillos).

Han pasado casi dos semanas desde que las cuatro alternativas se pusieron sobre la mesa, pero los negociadores no han cedido en nada públicamente de manera oficial, solo ha habido parlamentarios oficialistas que se han descolgado y abierto a la opción de un órgano mixto -entre ellos, el diputado Raúl Soto (PPD)-, pero todos ellos del Socialismo Democrático. Las posiciones siguen lejanas, no ha habido nuevas reuniones, aunque de manera soterrada han seguido de manera frenética las tratativas para lograr que se cierre un pacto esta semana o a más tardar la próxima.

El paso que dio Soto -y otros parlamentarios del sector- movió algunas piezas del tablero. El órgano mixto -uno que combine una mayoría de integrantes electos en urnas y una porción menor de expertos elegidos indirectamente por el Congreso- tiene piso político en Socialismo Democrático. También lo tendría en la derecha.

Es en Apruebo Dignidad donde aparecen los problemas. En esa coalición el único que ha dicho algo en esta línea es el timonel de RD, Juan Ignacio Latorre. El resto de sus socios del bloque han mantenido silencio. El más reticente a ceder es el presidente de Convergencia Social, Diego Ibáñez.

Es por esto que la mayoría de los negociadores cree que el órgano mixto es la única llave para destrabar el acuerdo. Por lo mismo, lo que haga el Presidente Boric -quien en su última intervención en la materia se inclinó por un órgano electo, sin mencionar explícitamente que fuera 100% con esa fórmula- es gravitante, según reconocen, incluso en Chile Vamos, donde han emplazado, en otras ocasiones, a que La Moneda no intervenga y se mantenga al margen.

El Mandatario, en todo caso, ya está moviendo sus fichas. Ha conversado (por Signal o por teléfono) con varios dirigentes -del oficialismo y la oposición- que están sentados en la mesa negociadora. Así, ha hablado con la timonel del PPD, Natalia Piergentili; con el líder de RD, Juan Ignacio Latorre; con el presidente de la UDI, Javier Macaya, entre otros.

“Ha manifestado un legítimo interés por el proceso”, dijo el sábado Piergentili, en entrevista con La Tercera, respecto a sus diálogos con el Mandatario.

Con ellos, según quienes han sabido de los contactos, el Jefe de Estado se ha dedicado principalmente a escuchar las distintas opiniones con miras a intentar encauzar el debate. Varios de ellos les han transmitido su inquietud por cómo están las tratativas. En el Socialismo Democrático el mensaje ha sido que ordene a su coalición de base: Apruebo Dignidad. Lo mismo ha pedido Chile Vamos.

A La Moneda, en todo caso, le interesa que el acuerdo sea exitoso y que Boric termine su mandato firmando la nueva Constitución de Chile. Por lo mismo, agregan las mismas fuentes, Boric no puede esquivar el rol que tiene como jefe de la alianza de gobierno.

Más aún cuando es Ibáñez, el timonel del partido del Presidente, el que se resiste a ceder. En Socialismo Democrático piden que Boric baje la línea en Apruebo Dignidad o en su propio partido para poder darle aire a la negociación.

La mejor señal, dicen, podría ser que en público -cuando sea consultado por el tema- tome posición a favor del órgano mixto. En su defecto, podría tomar un camino similar al de la ministra Segpres, Ana Lya Uriarte.

En una entrevista con La Tercera, Uriarte fue muy clara en que el gobierno apoyará cualquier decisión que tomen sus partidos. Fue consultada una y otra vez sobre el tema y ella no cambió su posición. “Lo que quiero decir es que si las fuerzas políticas en medio de su conversación política toman decisiones que habiliten el proceso constituyente, nosotros como gobierno que hemos estado acompañando este proceso, seguiremos acompañando el proceso hasta su total conclusión”, dijo la ministra. No hubo ninguna mención a un órgano 100% electo.

En el Socialismo Democrático comentan en privado que ellos no darán el paso, porque saben que cuando lo hagan, será Apruebo Dignidad el que les recrimine haber cedido. Por eso, la mayoría de los negociadores están convencidos de que la llave la tienen Boric y Apruebo Dignidad.

ESTRATEGIA DE CHILE VAMOS

Lo han conversado en privado y ya han dado algunas luces en público. Chile Vamos busca desplegar una estrategia comunicacional para emplazar al oficialismo a fijar una postura y acusarlos de querer dilatar el acuerdo constitucional. Un mensaje que también se lo han hecho saber al gobierno.

En RN, por ejemplo, le han transmitido a la ministra Uriarte que no están dispuestos a seguir postergando este tema. En el sector creen que ahora tienen la llave de cerrar un pacto que más les acomode y deje feliz a sus bases. Por eso, se molestaron con la postura de Ibáñez y el Frente Amplio (FA) de querer aplazar las elecciones -en un inicio pensadas para fines de marzo- hasta octubre o septiembre, en caso de que se opte por un órgano 100% electo. Esto, porque creen que eso es un diseño de esa coalición para esperar que la situación del país “mejore” y que los termine favoreciendo.

En esa línea, RN, por ejemplo, advirtió al Ejecutivo que si quieren seguir aplazando zanjar un acuerdo, ellos podrían hacer lo mismo con la reforma previsional. También pidieron saber si la movida de Ibáñez para aplazar los comicios representa o no la opinión del Presidente.

Por lo mismo, en la UDI también le han hecho saber a La Moneda su descontento con la idea propuesta por Ibáñez. Esto, porque, a su juicio, no hay margen que el plebiscito de salida quede cerca de los comicios municipales.

La respuesta del oficialismo, según les han reconocido a dirigentes de derecha, es que Apruebo Dignidad está complicado. No les convence ir tan pronto a un órgano 100% electo por el riesgo de darle una nueva derrota electoral al gobierno, pero tampoco les gusta que sea un órgano 100% designado porque consideran que el proceso pierde legitimidad democrática. Además, las bases más duras del FA y del PC están presionando para no entregar lo que, para ellos, es el núcleo del acuerdo.

La pelota, dicen en Chile Vamos, la tiene el Presidente. Mientras él no haga lo suyo, ellos seguirán presionando para evitar que les endosen a ellos no querer pactar un acuerdo constitucional.

Macaya este martes dijo, en entrevista con radio Duna, que “sigo teniendo esperanza que de que este tema lo vamos a cerrar de buena manera. Yo creo que esta semana es clave para cerrar este tema. Espero que sea esta o, máximo, la próxima semana”. (La Tercera)