Un nuevo tiroteo mortal sacudió este jueves a una institución educacional en EE.UU.: esta vez el ataque, ocurrido en una universidad de Oregon, deja al menos quince muertos y más de 20 heridos.
El trágico incidente se produjo en la Umpqua Community College situada en Roseburg, al oeste de Estados Unidos.
La policía local confirmó que los disparos se produjeron en el Umpqua Community College. El recuento preliminar de víctimas fue entregado por el portavoz de la policía estatal de Oregon, Bill Fugate, de acuerdo con la cadena CNN.
Un oficial del condado de County habría confirmado que el sospechoso fue detenido. Aún no se había informado si el aprehendido resultó lesionado.
Luego de que se diera la alarma, un amplio despliegue policial rodeó la institución educativa. Se informó que unidades especializadas pesquisaban si había explosivos u otros elementos peligrosos en el área del tiroteo.
La policía local busca determinar si el atacante actuó solo o en compañía de más personas.
La universidad de Umpqua, fundada en 1964, cuenta con un registro de 3.300 alumnos a tiempo completo y 16 mil con jornada parcial.
PRESIDENTE OBAMA
El Presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dijo que las matanzas en su país se han vuelto una «rutina», tras la balacera que esta tarde dejó a 13 muertos en un centro educacional en Oregon.
«Somos el único país avanzado que ve estos tiroteos cada cierto tiempo», se lamentó amargamente Obama en un discurso pronunciado en la sala de conferencia de la Casa Blanca,
Obama subrayó que las oraciones por las víctimas «no son suficientes» y que es necesario abordar el problema lo antes posible desde un punto de vista político para atajar la violencia armada en el país.
Visiblemente afectado, recordó que «como ya he dicho hace un mes, y lo he dicho unos meses antes de eso, y también cada vez que esto pasa, nuestros pensamientos y oraciones simplemente no son suficientes. Eso no es suficiente».
En Estados Unidos, dijo, «hay aproximadamente un arma de fuego por cada hombre, mujer y niño. ¿Cómo es que alguien puede argumentar que más armas nos tornan más seguros?».
En la última década, señaló Obama, más estadounidenses murieron víctimas de actos de violencia armada en el país que en «actos de terrorismo».
«Y sin embargo, tenemos un Congreso que explícitamente nos impide siquiera colectar información sobre como podemos reducir las muertes violentas», expresó el mandatario, sin ocultar su irritación.
Para Obama, la noción de que la constitución prohíbe cualquier regulación sobre uso de armas «no tiene sentido».
