La Reserva Federal (Fed) de EEUU decidió, tal como se esperaba, mantener la tasa de interés en el rango de 0,25% y el 0,50% con la mira puesta en el mercado laboral de EEUU y en el potencial impacto del Brexit.
Se trata de una nueva pausa en el ritmo de ajuste monetario luego que en diciembre estimara cuatro alzas de tasas para 2016.
El banco central estadounidense elevaría sólo una vez el precio del dinero este año, según se desprende de la estimación de al menos seis funcionarios de la Reserva Federal.
La entidad dirigida por Janet Yellen no ha podido elevar el precio del dinero ante las dudas sobre la evolución de la economía en Estados Unidos, especialmente el empleo, y también por la incertidumbre internacional.
Según el comunicado, todos los asistentes presentes votaron a favor de mantener la tasa, lo que contrasta con reuniones anteriores, cuando siempre algún miembro de la Fed abogaba por subirlos cuanto antes.
BAJA PROYECCIÓN DE CRECIMIENTO
La Reserva Federal bajó también las estimaciones de crecimiento del PIB en Estados Unidos, desde el 2,2% que pronosticaba en marzo al 2%.
El desempleo se mantendrá en el 4,7%, según sus cálculos, mientras la inflación se situará en el 1,4%, un 0,2% más de lo previsto, para alcanzar el 1,9% el año que viene y el 2% en 2018.
YELLEN
La presidenta de la Reserva Federal, Janet Yellen, reconoció esta tarde que la incertidumbre que genera el referéndum sobre la salida del Reino Unido de la Unión Europea influyó que la decisión de mantener la tasa de interés en en junio.
«(El Brexit) fue un factor que influyó en la decisión por sus consecuencias», indicó la autoridad monetaria en su conferencia posterior a la entrega del comunicado.
El referéndum del próximo 23 de junio tiene a los mercados en ascuas por los potenciales efectos negativos en el mundo financiero, especialmente en la Unión Europea.
Goldman Sachs advirtió sobre un huida global de activos de riesgo y fuerte corrección en las bolsas, mientras que el FMI dijo quie sería un «factor negativo» para la recuperación de la economía mundial el triunfo del Brexit.
En materia local, la titular del banco central estadounidense espera un crecimiento moderado de la economía para lo que resta del año, tras datos dispares en las últimas semanas.
En esa línea, mostró optimismo en que mejorará el mercado laboral en los próximos meses luego del decepcionante dato de las nóminas no agrícolas correspondiente a mayo.
Además, Yellen se mostró sorprendida por la desaceleración de algunos sectores de la economía no vinculados al sector petrolero.
DOLAR EN CHILE
El dólar bajó hoy frente al peso chileno en una sesión marcada por el respiro de los mercados internacionales al Brexit y a la espera de la Reserva Federal que en un par de minutos se pronunciará sobre la tasa de interés.
El tipo de cambio cerró en $ 686 comprador y $ 686,30 vendedor, lo que implica un retroceso de $ 4 respecto al cierre del martes.
La cotización coincidió con el aumento del precio del cobre tras varias caídas, el retroceso generalizado del dólar y buenos datos sobre la salud de la economía estadounidense.
Esto contrasta con la posible salida del Reino Unido de la Zona Euro, hecho que tiene a los mercados mundiales en vilo.
«Para los próximos días esperamos que el tipo de cambio se encuentre en niveles de 685/695, principalmente debido a que el escenario de incertidumbre se mantendrá, e inclusive se puede incrementar, en la medida que nos acerquemos a la fecha de la decisión del Reino Unido (BREXIT)», dijo Jaime Fernández, Gerente de Trading de Banco Internacional.
GOLDMAN SACHS
La ola de ventas desatada esta semana por el temor al resultado del referéndum que Reino Unido celebrará el próximo 23 de junio, para decidir si el país permanece en la Unión Europea (UE), no se explica solo por las últimas encuestas. Un informe enviado el lunes a los inversores por Goldman Sachs ha alimentado el nerviosismo al ser el primero emitido por uno de los grandes bancos internacionales donde se vaticina la victoria de los partidarios de salir de la UE.
«La probabilidad de Brexit [salida de la UE] es alta», opina Goldman, entidad que anticipa una huida de inversores de la bolsa hacia activos refugio el próximo 24 de junio, al no estar preparados para ese resultado.
La nota está firmada por Bobby Vedral, director de estrategia en el área de divisas de Goldman Sachs en Londres. Aunque advierte que la previsión de victoria del Brexit es de su equipo y no de Goldman como institución, el informe está corriendo como la pólvora entre los inversores de la City, atizando la corrección de la libra, la Bolsa de Londres y el resto de parqués europeos. Los analistas de otros bancos y las casas de apuestas siguen dando más opciones a que los británicos voten por seguir en la UE, mientras las encuestas dan ventaja al Brexit.
Goldman Sachs ofrece varias razones para su apuesta por la victoria del Brexit. El banco prevé una mayor participación en el referéndum de personas mayores, que en general apoyan la ruptura con Bruselas. Además, señala que la campaña del Brexit está explotando el temor de los británicos a la inmigración y el terrorismo, al argumentar que salir de la UE permitirá controlar la frontera.
«Alguna amenaza de seguridad (como las bombas que cambiaron el desenlace esperado de las elecciones españolas de 2004), no puede ser descartada», dice el documento. Además, la entidad señala al aumento del voto protesta en Reino Unido, que en este caso significará desoír el consejo del primer ministro británico David Cameron para seguir en la UE.
Lo más preocupante a juicio de Vedral y su equipo es que aunque el Brexit es un riesgo conocido, el mercado no está preparado. Según la última encuesta entre gestores de fondos de Merrill Lynch, el 30% ve el Brexit como el mayor riesgo global, pero apenas un 5% cree que se vaya a producir. Esto hace, según Goldman Sachs, que la victoria del Brexit «será una verdadera sorpresa que exigirá un agudo ajuste de las carteras y movimientos en el mercado«.
Corrección en los mercados bursátiles
Según el informe, se producirá una huida global de los activos de riesgo, con una fuerte corrección en las bolsas y la libra, que se extenderá a toda Europa.
Ante esta posible tormenta, «los bancos centrales (en primer lugar el Banco de Inglaterra, pero también otros) estarán preparados para animar el sentimiento [del mercado], con probable apoyo a los bonos del Gobierno y puede que a los bonos corporativos».
Esto hará, según Goldman, que «el foco de la corrección se produzca en activos que no van a ser apoyados [por los bancos centrales]: principalmente Bolsa y divisas (fortaleza del yen y el franco suizo, debilidad de la libra y probablemente del euro],y también en mercados emergentes. La primera reacción se centrará probablemente en la venta de activos británicos, pero pronto quedará claro que este es un problema europeo».
Tasas y dólar
Ante este potencial escenario, Vedral recomienda la compra de dólares. «Si se produce un voto por permanecer en la UE, creo que la Fed (Reserva Federal estadounidense) subirá tasas antes de lo previsto, lo que es bueno para el dólar. Si triunfa la opción de salida de la UE, es bueno también estar largo en dólares por la huida de activos de riesgo que se producirá».
Esta búsqueda de refugio en Estados Unidos ante el posible Brexit ya se nota en el mercado, con la rentabilidad del bono americano bajando al ritmo de la libra, apuntaba ayer otra nota de Société Générale. También explica el reciente desplome en la rentabilidad del bono alemán.
Curiosamente, a medio plazo, los analistas de Goldman Sachs indican que aunque ganen los partidarios de salir de la UE, esto podría no traducirse en un Brexit real. «Otro posible escenario es que este voto desencadene un nuevo tratado europeo que refleje la nueva realidad política de círculos concéntricos moviéndose a diferentes velocidades en lugar de buscar todos un mismo objetivo».
En cualquier caso, Goldman no es infalible. A principios de año, por ejemplo, pronosticó que el petróleo bajaría a US$ 20 dólares, y ahora ronda los 50. También apostó para 2016 en las acciones de los bancos americanos y los bonos italianos frente a los alemanes, sin excesivo acierto.
Según concluye el informe de Goldman sobre el Brexit, «hay que confiar en lo mejor, pero estar preparado para lo peor».
EFECTOS EN CHILE
Chile también sufriría, en el corto plazo, los efectos por el llamado «Brexit» o salida del Reino Unido de la Unión Europea, decisión que tomarán los británicos el próximo 23 de junio.
Al menos así lo cree un grupo de economistas que sostienen que la volatilidad financiera que generaría este movimiento, en caso de materializarse, tendría efectos sobre el tipo de cambio, los mercados, el precio del cobre y una reducción del comercio, entre otros.
Raphael Bergoeing, economista y académico de la Universidad de Chile, prevé que la volatilidad que podría generar el Brexit tendría efectos sobre los mercados de capitales e inestabilidad financiera en el corto plazo.
«El principal efecto en Chile, en el corto plazo, puede ser una inestabilidad que lleve a fluctuaciones importantes en las monedas, en los precios de los commodities por una mayor convulsión financiera (…) En el corto y mediano plazo el efecto en la volatilidad puede ser gigantesco», dijo el ex superintendente de Bancos.
«Vamos a tener un efecto financiero que durante un rato largo podría terminar siendo muy convulsionado y que es imposible de cuantificar hoy día en términos de cambios en paridades de monedas, en las bolsas», añadió.
Gonzalo Sanhueza, socio y director de Econsult RS Capital, cree que el primer efecto del Brexit sobre la economía chilena estará dado por la reducción del comercio mundial ante la posible aparición de medidas proteccionistas.
«Lo primero que afecta a Chile es por una reducción del comercio mundial. El Brexit traerá probablemente una nueva ola de proteccionismo y Chile es una economía muy abierta y que depende mucho del comercio exterior», expuso.
En la misma línea, Carlos Budnevich, economista y académico de la Universidad de Los Andes, coincidió en que entre los efectos del Brexit se encontrarán mayores barreras al comercio internacional, lo que perjudica el crecimiento chileno.
«Chile es muy dependiente en general del comercio internacional y en la medida que la economía internacional vea dificultado su crecimiento, esto tiene consecuencias negativas para Chile, para sus términos de intercambio y para el motor de crecimiento que son las exportaciones», dijo.
COBRE
Los economistas también coinciden en que el Brexit tendría un efecto sobre el valor de los commodities como el cobre, cuyos precios caerían ante una posible alza del dólar estadounidense.
«En la medida que se fortalece el dólar, los precios de commodties caen y eso va a terminar exacerbando el problema de expectativas que tenemos hoy en Chile que está, en parte, alimentado por un precio del cobre que ha caído», advirtió Bergoeing.
Gonzalo Sanhueza aseguró que «la volatilidad que habrá en los mercados financieros son escenarios en que se fortalece el dólar americano pero también cae el precio de los commodities. Entonces probablemente habrá un precio del cobre más bajo».
Budnevich explicó que las menores perspectivas del crecimiento de la economía mundial pueden «deteriorar o frenar la recuperación del cobre y eso significa que somos más pobres en términos de dólares y eso debería presionar en algo el tipo de cambio».
Aunque el economista dice que esto podría ayudar a las exportaciones no tradicionales, por otro lado «generaría consecuencias en la inflación y eso es complicado».
Sanhueza sintetizó todos estos elementos al afirmar que el Brexit «nos afecta por el lado del crecimiento, de menor comercio mundial y caída en precios de commodities. Es un escenario negativo para Chile».
EL MUNDO
El referéndum del próximo 23 de junio tiene a los mercados en ascuas por los potenciales efectos negativos en el mundo financiero, especialmente en la Unión Europea.
EL Fondo Monetario Internacional, por su parte, dijo quie sería un «factor negativo» para la recuperación de la economía mundial el triunfo del Brexit.
El subdirector gerente del Fondo pronosticó que, en caso de que el resultado del referéndum sea favorable al «Brexit», se produciría un periodo con mayor incertidumbre para resolver «los arreglos comerciales y de otro tipo» entre el Reino Unido y la UE.
Las consecuencias de esa etapa de incertidumbre, añadió Lipton, no se limitaría a los Veintiocho, sino que tendrían «un alcance más amplio».
«Es muy difícil anticipar exactamente cuáles serían esos efectos, pero la incertidumbre sería un factor negativo y llegaría en un momento en el que la recuperación global sigue siendo lenta y algo débil y ese tipo de incertidumbre no sería útil», afirmó el número dos del FMI. (DF Expansión)


