De acuerdo al catastro del Ministerio de Medio Ambiente, la región metropolitana cuenta con cerca de700 microbasurales y 65 vertederos ilegales de residuos sólidos concentrados en 6 comunas. Las cifras dadas a conocer por el Intendente Claudio Orrego se explican por la existencia de lo que denominó «una verdadera mafia ilegal del transporte de la basura. En Chile existe solamente la posibilidad de sancionar al que bota basura. Es decir, uno tiene que a nivel municipal pillarlo in fraganti. Sacarle una fotografía y recién ahí se le puede multar», explicó.
Orrego anunció que el gobierno pondrá urgencia al proyecto de ley que sanciona el transporte ilegal de basura y que se discutirá el próximo martes en comisión mixta del Congreso. El proyecto contempla multas, la suspensión de la licencia de conducir o inhabilidad para obtenerla y el retiro del vehículo al que encargue o realice el transporte o depósito de basuras, desechos o residuos de cualquier tipo en la vía pública, sitios eriazos o vertederos ilegales.
Además, si el transporte y depósito se refiere a desechos tóxicos, peligrosos o infecciosos, la multa será de 20 a 100 unidades tributarias mensuales, es decir, entre $ 843.560 y $ 4.217.800 y será castigado con presidio menor en su grado medio.
El Intendente Orrego indicó que «no hay nada más indigno que vivir cerca de un microbasural y en Santiago lamentablemente tenemos a miles de santiaguinos, especialmente de las comunas más populares como Quilicura, Pudahuel, Puente Alto, La Pintana, La Florida, San Bernardo, Maipú, que están afectados por estos microbasurales».
